7/07/2015

Peter Pan advice

Escuchame leyendo esto.

Me sonrojé como un niño, sonreí con vergüenza. Sentí curiosidad, fui valiente y tuve miedo. Brindé con uno de mis hermanos y las bendiciones llovieron sobre nosotros, compartimos un abrazo eterno, una manifestación del Amor universal entre los seres cósmicos resumida en un abrazo y unos mates. Nos descubrimos y nos encontramos, entendimos y nos alegramos. Hemos visto más de la vida.

Caminé por Corrientes con el pecho abierto, las alas desplegadas de par a par y totalmente sorprendido, por momentos confuso. No sabía que ser feliz era así de magnífico, de intenso y desbordante, lo recomiendo mucho.

Sospecho seriamente que al universo no solo le agrada implementar giros argumentales en mi vida, lo disfruta mucho. Me atrevería que a decir lo goza.
Me sentí ofendido ocasionalmente y alcé mi voz exaltado, abrumado me pregunté ¿por que? Y eso es algo que no sucede hace mucho tiempo en mi vida, un presente navideño que no se volverá a festejar jamás. Guardé el enojo en el estomago toda la noche y me sentí en una montaña rusa emocional.
Pasaron las horas y volví a sonreír sin esfuerzos, sin resistencia posible me sentí luminoso y sobre todo afortunado. Creo que exageré un poco, se me escapó un dramatismo.
Están cambiando muchas cosas a un paso muy veloz. No siempre es un mecanismo perfecto y en ocasiones los dientes del engranaje no encajan como deberían a la primera. Aprendí mucho. Y entendí que entrar en disputa con alguien tan luminoso es realmente intenso. Comprendí que no solo me peleaba con ella, debía pelear conmigo mismo y mis demonios y mis angelitos, todos en confrontación. Y supe compartíamos la experiencia.

Estoy trabajando en muchas cosas, por primera vez en mi vida me sentí interesante, recibí mucha atención y para ser sincero es la atención que me gusta recibir, en esa dosis y variedad. Me cuesta mucho concentrarme y postergo, me distraigo, me miento. Hoy no me permití estancar mis éxitos personales un día más y me senté a trabajar lo más concentrado que pude. Unos puchos y un te de durazno después, tras haber hecho algunas correcciones sonaban las ultimas notas de Also Sprach Zarathustra por Richard Strauss y al poner el punto final estallaron los aplausos y ovaciones. Perdí toda palabra, me quedé mudo. Estamos ante otra emoción desconocida, nueva.
Será motivada por las creencias o escepticismo de cada quien, pero eso en mi vida es una señal de que estás haciendo las cosas bien.

Abracé a mis hermanitos y les dije todas esas cosas que a mi me hubiese gustado oír. Me vi en ellos, siendo quien soy y me necesité. Les pedí que hagan arte, cualquier arte, pintura o música, dibujo o maquetas, pero es necesario. Por su salud, por su progreso y expresión, por su talento y por la humanidad. El arte es la maravilla que prosigue a la creación misma de la vida y les va a abrir muchas puertas, y les va a cerrar otras, pero lo van a Amar. Van a aprender a Amar haciendo arte.
Les dí consejos, les conté anécdotas y que aprendí de ellas. Compartimos un ratito de hermanos y eso es fantástico.




Son tiempos rápidos y profundos, ojo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Traté pero no pude. Junté solo algunas. Otras tantas quedaran dando vueltas por ahí...
(Las mariposas)


Lau.

Erec Tortle dijo...

Tierna persona de internet <3